sábado, 3 de octubre de 2015

Necesito una de esas noches en las que me de la vuelta y te vea a mi lado, en las que me abrace a ti e involuntariamente me des un beso y automáticamente sonreír. Quiero despertar y verte a mi lado, hacerme la dormida para que me despiertes con un beso, mientras sonrío por dentro. Quedarnos horas en la cama hablando, mirándonos, incluso enfadándonos...para darme la vuelta en la cama y que me abraces por detrás para intentar calmarme. Quiero tus besos en el cuello, tus abrazos porque sí, tus miradas seductoras. Necesito uno de esos días en los que me tienes que esperar porque no sé que ponerme, en los que me preguntas qué ponerte, y en los que a la vez pienso que con todo lo que te pongas te seguiré viendo igual de perfecto. Quiero volver a escuchar nuestras canciones mientras nos miramos a los ojos; saltar y bailar en la cama mientras tú seguramente piensas: qué loca está. Quitarme el maquillaje en el espejo y que aparezcas tú por detrás para decirme: me gustas mucho más así. Me gusta cuando intento ocultar mis complejos y me lo impides hasta hacerme ver que te gusto como soy. Verte hacer el tonto en la ducha a través de tu reflejo, e incluso cuando te cargas la cortina de la bañera; me río de ti, te ríes de mí. Hacernos fotos estúpidas y reírnos juntos de nosotros mismos. Ir de la mano por la calle, de esa manera tuya tan peculiar entrelazando nuestros dedos,  y notar fija la mirada de la gente en nosotros, pero sin salir de nuestra pompa. Me gusta incluso cuando te rayas, cuando discutimos, porque cuando estás abajo luego la subida es mejor, porque después de discutir las sonrisas son mayores y los besos se sienten el doble. También que salgamos a comer y te rías de lo lenta que como mientras tú ya has terminado todo el plato. Confiarte mis mayores secretos, experiencias. Querer sentarnos siempre de manera que podamos besarnos, que cada abrazo sea algo inexplicable. Que pasen días sin verte y cuando te vea sea un regalo para mis cinco sentidos, que todas las dudas o miedos que pudiera tener de repente al verte desaparezcan. Aunque me pierda por la calle, aunque sigamos discutiendo y perdonándonos, aunque estemos a kilómetros e incluso aunque estuviéramos a más, seguiría queriendo y necesitando todo esto.

domingo, 13 de septiembre de 2015

Lo que hace falta.

El mundo necesita más visitas inesperadas, más besos robados, más historias de esas que no sabes en qué momento ni cómo empezaron, más sentimientos de esos que no sabes describir. Menos conectarse y más desconectar, hace falta menos mensajes y más llamadas, menos pensar y más actuar. Hacen falta personas dispuestas a darlo todo y más, a vivir intensamente, a no tener miedo a destacar. Personas así, por favor.

lunes, 20 de abril de 2015

*

Cuando sientes que todo te esquiva..la suerte, el amor, la amistad, tú mismo te esquivas..te pierdes. Cuando no quieres ni siquiera compartir lo que piensas, lo que sientes, porque piensas que ya no vale para nada, que tu destino está escrito, y que quizás hay ciertas cosas que no se escribieron para ti. Quizás no sea mío el destino del amor, quizás la suerte me es demasiado esquiva por alguna razón, quizás es mi culpa, quizás no. Preguntas sin respuesta, como un camino sin dirección, un estribillo sin canción.

lunes, 16 de marzo de 2015

Hay momentos en los que te invaden los "por qué", en los que piensas que tu perfecta estructura de felicidad se puede venir abajo en cualquier momento, momentos en los que arrasarías con todo para escapar muy lejos, porque de repente sientes que nada funciona. Pero de repente aparece alguien, aparece alguien que te sujeta, que te hace poner los pies en la tierra, mirar a tu alrededor y mirar lo bonita que puede ser la vida con la persona adecuada. Quizás el error está en pensar que una vida tiene que ser perfecta para obtener la felicidad. Nada va a ser perfecto nunca, nada a nuestro alrededor va a dejar de girar, ni nosotros de envejecer, ni el sol dejará de ponerse cada noche. Todo fluye, todo cambia, y al igual que un día todo te puede parecer maravilloso al día siguiente todo eso puede desaparecer. Lo importante no es la historia, son los momentos que la componen, las personas que la protagonizan, que cada día te hacen levantarte con ganas de sacar lo mejor de cada problema. Si tienes alguien en tu vida capaz de apoyarte por encima de todo, que su bienestar es el tuyo y capaz de poner el mundo del revés por ti, esa persona no la pierdas, y esa persona, es la que importa, no esos problemas de cada día que te hacen pensar que el resto no merece la pena.

martes, 3 de febrero de 2015

Relaciones tormentosas.


Relaciones tormentosas, de esas que te encienden el alma y te hacen cada día aspirar a más, que te hacen cada día acostarte con un sabor de boca diferente al anterior y que te levantes con la esperanza de que algún día todos vuestros días sean iguales, destinados simplemente a quereros. Relaciones en las que das todo y más, en las que entregas el alma entera y parte de lo que ni tienes, en las que sin esa persona sientes a veces que puedes soportarlo, pero en cuanto le ves por inercia tienes que acercarte. Sois imanes, diferentes pero iguales, vagando en el abismo de lo que es el amor, pero sin rumbo fijo, sin objetivo, simplemente dejándoos llevar poniendo el corazón en cada uno de los momentos juntos. Las relaciones de las más grandes discusiones o los más tontos piques, en los que por momentos sientes que la otra persona es como de un mundo totalmente opuesto al tuyo, momentos en los que le reventarías, en los que le gritarías de todo, pero tan solo te sale reventarle pero la boca a besos y gritarle un millón de veces que le quieres. La persona con la que lo reprimes todo, pero con la que más sientes. Por la que lloras, pero la que mejor te consuela. La persona por la que por mucho que pasen los años seguirás dudando entre ella y el resto del mundo, porque a pesar de ser un ser completamente imperfecto, nadie mejor que él conoce a la perfección cada línea de expresión, nadie mejor sabe dibujarte una sonrisa e incluso al segundo borrártela. Nadie mejor que él sabe como controlar tu temperatura a su antojo,hacerte vibrar y sentir a través de su piel todo lo que él está sintiendo cuando te toca, cuando te besa, cuando te mira. Una química irremplazable en la que por un minuto solo existen dos personas en el mundo, y sois vosotros. Una química que puedes revivir en cualquier momento con solo cerrar los ojos e imaginar que está a tu lado rozándote, con escuchar su voz, con cualquier tontería.
Sois dos seres llenos de imperfecciones, las cuales os reprocháis el 99,9% de veces que os veis, con un pasado oscuro, muy oscuro y lleno de errores, pero que al miraros a los ojos, desaparece por completo, porque sorprendentemente con él, y solo con él, pesa mucho más el otro 0,1 % restante, en el que os estáis besando, ni siquiera hablando, ni siquiera diciéndoos que la otra persona tiene algo que nadie tiene, aunque lo sintáis, porque entre vosotros las palabras sobran. Los gestos, la comunicación no verbal es el principal artilugio de vuestra relación,de vuestro juego, al que solamente vosotros sabéis como jugar sin saber nunca como parar, como frenar definitivamente, llegue quien llegue y se cruce quien se cruce en el camino. Esa capacidad de hacer que cada una de estas tonterías sean esenciales, y a vuestra manera, cada vez que veis, necesitaros más que nadie. Que vuestros cuerpos se necesiten, se llamen, se anhelen. Son relaciones complicadas,únicas e inigualables.

viernes, 16 de enero de 2015

Ironías de la vida.

Suena irónico ahora escuchar,ver o leer cosas de hace unos años...textos en los que jurabas amor y fidelidad a algunas personas que ya no están en tu vida, o como pedías una y otra vez que una amistad, una relación, no acabara nunca. Es curioso como pasa la vida y como por mucho tiempo que pase seguimos sin comprender que nada es para siempre. Yo personalmente ahora me pongo a pensar y digo, realmente seguro que por la mitad de las cosas que ahora me preocupo a menudo, quizás dentro de unos años ya no estén, al igual que ahora veo ciertas cosas y pienso en como algunas personas salieron de mi vida sin yo apenas darme cuenta.
Es el ejemplo de mi clase, esa clase que tenía cuando era pequeña, y de la que tanto escribí muchas veces cuando se acercaba ya el momento de despedirnos para siempre. Bien pues, ese momento llegó hace ya más de dos años, y hay personas a las que sigo viendo muy a menudo, la mayoría me los sigo encontrando, sé de ellos a través de las redes sociales y sí que me consta que están bien, pero también es cierto que llegó el momento que tanto yo mencioné, ese momento en el que nos viéramos por la calle y ni nos saludáramos. Unos se saludan con unos, otros con otros, con unos te llevas mejor con otros peor, y otros que simplemente saludas por educación, pero esa mínima complicidad de grupo que había obviamente se perdió. Yo sinceramente nunca me sentí parte de esa unión y por tanto con los años y la madurez me he dado cuenta que tan solo echo de menos a personas concretas, pero sí que da pena que la cosa sea así.
Dicen que aunque una etapa de tu vida sea mala, luego cuando todo pasa, te quedas con lo mejor...bueno, pues algo ha debido pasar que yo por día veo algo malo nuevo en todo esto, y por día menos cosas buenas. Sé que tuve muchas personas ahí, pero personas que ahora no sé si realmente estuvieron de corazón, ya no lo sé,
En la vida no hay nada claro, no existen los "para siempre", los "por qué" no sirven de nada y la vida no te da respuestas sin que tú antes busques las preguntas. Hay que caer mil veces y dejar correr los años para ir viendo quien permanece y quien  no, quien realmente se queda y quien nunca estuvo, porque yo sé que dentro de otros 5 años, muchos de los que están ahora ya no estarán, pero bueno, eso es algo que tan solo el tiempo puede decir.